La vida es como una leyenda, no importa lo larga que sea, sino que este bien narrada

La vida es como una leyenda, no importa lo larga que sea, sino que este bien narrada

lunes, 1 de noviembre de 2010

LA ISLA

Hubo una vez una isla donde habitaban todas las emociones y todos los sentimientos humanos que existen. Convivían, por supuesto, el Temor, la Sabiduría, el Amor, la Angustia, la Envidia, el Odio...Todos estaban allí. A pesar de los roces naturales de la convivencia, la vida era sumamente tranquila e incluso previsible. A veces la Rutina hacía que el Aburrimiento se quedara dormido, o el Impulso armaba algún escándalo, pero muchas veces la Constancia y la Convivencia lograban aquietar el Descontento.
Un día, inesperadamente para todos los habitantes de la isla, el Conocimiento convocó una reunión. Cuando la Distracción se dio por enterada y la Pereza llegó al lugar de encuentro, todos estuvieron presentes.
Entonces, el Conocimiento dijo:
-Tengo una mala noticia que darles: la isla se hunde.
Todas las emociones que vivían en la isla dijeron:
-¡No, cómo puede ser! ¡Si nosotros vivimos aquí desde siempre!
El Conocimiento repitió:
-La isla se hunde.
- ¡Pero cómo puede ser! ¡Quizá estás equivocado!
- El Conocimiento casi nunca se equivoca- dijo la Conciencia dándose cuenta de la verdad-. Si él dice que se hunde, debe ser porque se hunde.
- ¿Pero qué vamos a hacer ahora?- se preguntaron los demás.
Entonces, el Conocimiento contestó:
- Por supuesto, cada uno puede hacer lo que quiera, pero yo les sugiero que busquen la manera de dejar la isla...Construyan un barco, un bote, una balsa o algo que les permita irse, porque el que permanezca en la isla desaparecerá con ella.
- ¿No podrías ayudarnos?- le preguntaron todos, porque confiaban en su capacidad.
- No ?dijo el Conocimiento-, la Previsión y yo hemos construido un avión y en cuanto termine de decirles esto volaremos hasta la isla más cercana.
Las emociones dijeron:
-¡No! ¡Pero no! ¿Qué será de nosotros?
Dicho esto, el Conocimiento se subió al avión con su socia y, llevando de polizón al Miedo, que como no es zonzo ya se había escondido en el motor, dejaron la isla.
Todas las emociones, en efecto, se dedicaron a construir un bote, un barco, un velero...Todas...salvo el Amor.
Porque el Amor estaba tan relacionado con cada cosa de la isla que dijo:
-Dejar la isla...después de todo los que viví aquí...¿Cómo podría yo dejar este arbolito, por ejemplo? Ahhh...compartimos tantas cosas...
Y mientras las emociones se dedicaban a fabricar el medio para irse, el Amor se subió a cada árbol, olió cada rosa, se fue hasta la playa y se revolcó en la arena como solía hacerlo en otros tiempos. Tocó cada piedra...y acarició cada rama...
Al llegar a la playa, exactamente desde donde el sol salía, su lugar favorito, quiso pensar con esa ingenuidad que tiene el amor:
?Quizá la isla se hunda por un ratito...y después resurja...¿por qué no??
Y se quedó durante días y días midiendo la altura de la marea para revisar si el proceso de hundimiento no era reversible...
La isla se hundía cada vez más...
Sin embargo, el Amor no podía pensar en construir, porque estaba tan dolorido que sólo era capaz de llorar y gemir por lo que perdería.
Se le ocurrió entonces que la isla era muy grande, y que aun cuando se hundiera un poco, siempre él podría refugiarse en la zona más alta... Cualquier cosa era mejor que tener que irse. Una pequeña renuncia nunca había sido un problema para él.
Así que, una vez más, tocó las piedritas de la orilla...y se arrastró por la arena...y otra vez se mojó los pies en la pequeña playa que otrora fue enorme...
Luego, sin darse cuenta demasiado de su renuncia, caminó hasta la parte norte de la isla, que si bien no era la que más le gustaba, era la más elevada...
Y la isla se hundía cada día un poco más...
Y el Amor se refugiaba cada día en un espacio más pequeño...
- Después de tantas cosas que pasamos juntos...- le reprochó a la isla.
Hasta que, finalmente, sólo quedó una minúscula porción de suelo firme; el resto había sido tapado completamente por el agua.
Justo en ese momento el Amor se dio cuenta de que la isla se estaba hundiendo de verdad. Comprendió que, si no la dejaba, el amor desaparecería para siempre de la faz de la Tierra...
Caminando entre senderos anegados y saltando enormes charcos de agua, el Amor se dirigió a la bahía.
Ya no había posibilidades de construirse una salida como la de todos; había perdido demasiado tiempo en negar lo que perdía y en llorar lo que desaparecía poco a poco entre sus ojos.
Desde allí podría ver pasar a sus compañeros en las embarcaciones. Tenía la esperanza de explicar su situación y de que alguno de sus compañeros le comprendiera y le llevara.
Observando el mar, vio venir el barco de la Riqueza y le hizo señas. La Riqueza de acercó un poquito a la bahía.
-Riqueza, tú que tienes un barco tan grande, ¿no me llevarías hasta la isla vecina? Yo sufrí tanto la desaparición de esta isla que no pude fabricarme un bote...
Y la Riqueza le contestó:
- Estoy tan cargada de dinero, de joyas y de piedras preciosas, que no tengo lugar para ti, lo siento...- y siguió su camino sin mirar atrás.
El Amor siguió observando, y vio venir a la Vanidad en un barco hermoso, lleno de adornos, cárieles, mármoles y florecitas de todos los colores. Llamaba muchísimo la atención.
El Amor se estiró un poco y gritó:
-¡Vanidad...Vanidad...llévame contigo!
La Vanidad miró al Amor y le dijo:
- Me encantaría llevarte, pero...¡tienes un aspecto!...¡estás tan desagradable...tan sucio y tan desaliñado!...Perdón, pero creo que afearías mi barco- y se fue.
Y así, el Amor pidió ayuda a cada una de las emociones. A la Constancia, a la Sensualidad, a los Celos, a la Indignación y hasta al Odio. Y cuando pensó que ya nadie más pasaría, vio acercarse un barco muy pequeño, el último, el de la Tristeza.
- Tristeza, hermana- le dijo-, tú que me conoces tanto, tú no me abandonarás aquí, eres tan sensible como yo...¿Me llevarás contigo?
Y la Tristeza le contestó:
- Yo te llevaría, te lo aseguro, pero estoy taaaaaan triste....que prefiero estar sola- y sin decir más se alejó.
Y el Amor, pobrecito, se dio cuenta de que por haberse quedado ligado a esas cosas que tanto amaba, él y la isla iban a hundirse en el mar hasta desaparecer.
Entonces se sentó en el último pedacito que quedaba de su isla a esperar el final...
De pronto, el Amor escuchó que alguien chistaba:
- Chst- chst-chst...
Era un desconocido viejito que le hacía señas desde un bote de remos.
El Amor se sorprendió:
-¿A mi?- preguntó, llevándose una mano al pecho.
- Si, si- dijo el viejito- a ti. Ven conmigo, súbete a mi bote y rema conmigo, yo te salvo.
El Amor le miró y quiso darle explicaciones:
- Lo que pasó fue que me quedé...
- Entiendo- dijo el viejito sin dejarle terminar la frase-, sube.
El Amor subió al bote y juntos empezaron a remar para alejarse de la isla.
No pasó mucho tiempo antes de ver cómo el último centímetro que quedaba a flote terminó de hundirse y la isla desaparecería para siempre.
- Nunca volverá a existir una isla como esta- murmuró el Amor, quizá esperando que el viejito le contradijera y le diera alguna esperanza.
- No ? dijo el viejito-, como ésta, nunca.
Cuando llegaron a la isla vecina, el Amor comprendió que seguía vivo.
Se dio cuenta de que iba a seguir existiendo.
Giró sobre sus pies para agradecerle al viejito, pero éste, sin decir una palabra, se había marchado tan misteriosamente como había aparecido.
Entonces, el Amor, muy intrigado, fue en busca de la Sabiduría para preguntarle:
-¿Cómo puede ser? Yo no lo conozco y él me salvó...Nadie comprendía que me hubiera quedado sin embarcación, pero él me ayudó, él me salvó y yo no ni siquiera se quién es...
La Sabiduría lo miró a los ojos un buen rato y dijo:
- Él es el único capaz de conseguir que el amor sobreviva cuando el dolor de una pérdida le hace creer que es imposible seguir adelante. El único capaz de darle una nueva oportunidad al amor cuando parece extinguirse. El que te salvó, Amor, es el Tiempo.
JORGE BUCAY

ACASO ESTO ES AMOR ?

Camino por mi camino.Mi camino es una ruta con un solo carril, el mío.
A mi izquierda un muro eterno, separa mi camino del camino de alguien que transita a mi lado, del otro lado del muro.
De vez en cuando en este muro hay un agujero, una ventana, una hendidura… y puedo mirar hacia el camino de mi vecino o vecina.
Un día mientras camino, creo ver, del otro lado del muro, una figura que pasa a mi ritmo, en mi misma dirección.
Miro esa figura: es una mujer, es hermosa.
Ella también me ve. Me mira.
La vuelvo a mirar.
Le sonrío… y me sonríe.
Un momento después ella sigue andando su camino y yo apuro la marcha porque espero ansiosamente la próxima oportunidad de cruzarme con esa mujer.
En la próxima ventana me detengo un minuto.
Cuando ella llega, nos miramos a través de la ventana.
Parece tan encantada conmigo como yo con ella.
Le digo por señas lo mucho que ella me agrada.
Me contesta por señas. No sé si significan lo mismo que las mías, pero intuyo que ella entiende lo que quiero decirle.
Siento que me quedaría un largo rato mirándola y dejándome mirar, pero sé que mi camino continúa…
Me digo que más adelante en el camino, habrá seguramente una puerta y quizás pueda yo cruzar a encontrarme con ella.
Nada da más certeza que el deseo, así que me apuro por encontrar la puerta que imagino.
Empiezo a correr con la vista clavada en el muro.
Un poco más adelante la puerta aparece.
Allí está del otro lado, mi ahora deseada y amada compañera, esperando, esperándome.
Le hago un gesto, ella me devuelve un beso en el aire.
Me hace una seña como llamándome. Es todo lo que necesito.
Emprendo contra la puerta para reunirme con ella, de su lado del muro.
La puerta es muy estrecha, paso una mano, paso el hombro, hundo un poco la panza, me retuerzo un poquito sobre mí mismo, casi consigo pasar mi cabeza pero mi oreja derecha se queda trabada.
Empujo.
No hay caso, no pasa.
Y no puedo usar mi mano para torcerla, porque no podría poner ni un dedo allí…
No hay espacio para pasar con mi oreja, así que, tomo una decisión…
(Porque mi amada está allí, y me espera…).
(Porque es la mujer que siempre soñé y me llama…)
… Saco una navaja de mi bolsillo y de un sólo tajo rápido, me animo a darme un corte en la oreja para que mi cabeza pase por la puerta.
Y tengo éxito, mi cabeza consigue pasar…
Pero después de mi cabeza, veo que es mi hombro el que queda trabado.
La puerta, no tiene la forma de mi cuerpo.
Hago fuerza, pero no hay remedio, mi mano y mi cuerpo han pasado, pero mi otro hombro y mi otro brazo no pasan…
Ya nada me importa, así que…
Retrocedo, y sin pensar en las consecuencias, tomo envión y fuerzo mi paso por la puerta.
Al hacerlo, el golpe desarticula mi hombro y el brazo queda colgando como sin vida, pero ahora, afortunadamente, en una posición tal que no puedo atravesar la puerta…
Ya casi… casi, estoy del otro lado.
Justo cuando estoy a punto de terminar de pasar por la hendidura, me doy cuenta de que mi pie derecho se ha quedado enganchado del otro lado.
Por mucho que fuerzo y me esfuerzo, no puedo pasarlo.
No hay caso, la puerta es demasiado angosta para que mi cuerpo entero pase por ella.
Demasiado angosta, no pasan mis dos pies…
No lo dudo. Estoy ya casi al alcance de mi amada.
No puedo echarme atrás… Así que, agarro el hacha, y apretando los dientes, doy el golpe y desprendo la pierna.
Ensangrentado, a los saltos, apoyado en el hacha y con el brazo desarticulado, con una oreja y una pierna menos, me encuentro con mi amada.
Le digo:
- Aquí estoy. Por fin he pasado. Me miraste, te miré, me enamoré. He pagado todos los costos por ti… Todo vale en la guerra y el amor. No importan los sacrificios… valían la pena si eran para encontrarse contigo… para poder seguir juntos… juntos para siempre…
Ella me mira, se le escapa una mueca y me dice:
- Así no, así no quiero… A mí me gustabas cuando estabas entero.


JORGE BUCAY-CUENTOS PARA PENSAR-


esto es amor? para mi no lo es..para  mi el amor es mucho mas que lo fisico, es mucho mas que un conjunto de palabras lindas que nos derriten...el amor es dar...es recibir y es sobre todo demostrar.
Y sepan que a un amor verdadero no lo separa ni millones de kilometros y mucho menos un muro...es solo y unicamente cuestion de amar de querer.

jueves, 7 de octubre de 2010

El tiempo pasa...ya no somos los mismo de hace 2 años atrás...no pensamos igual..no sentimos lo mismo...y ahí es cuando nos sentamos a pensar si cambiamos..si cambio el otro, o si simplemente seguimos siendo los mismo y es la misma distancia que se formo hace que sientamos eso.
Se puede vivir toda una vida así..si se puede...pero estaremos condenados a vivir con problemas con peleas con enojos y a la larga esos problemas comienzan a doler, se comienza a no poder olvidar esos enojos, a decir perdón sin sentirlo, a disculpar sin olvidar.Y es así como todo va llegando a su fin, y vemos q todo se nos va de las mano e intentamos hacer las cosas bien y es peor, pareciera q cada cosita diminuta es un problemon enorme, entonces por mas doloroso q sea tomamos la decisión de alejarnos, nos alejamos si pero no olvidamos, no olvidamos esos momentos, momentos de risa, de historias, de converzaciones, de noches enteras hablando cosas que son imposibles de recordar ya q un tema deriva a otro y así sucesibamente.
Como olvidar a esa persona q es tu vida??? q por mas problemas q hallan por mas enfrentamientos q hallan es tu vida y no pones en duda eso...yo en mi lugar no puedo.
En este momento se me viene a la mente una frase MUCHAS PERSONAS SALEN Y ENTRAN DE TU VIDA..PERO SOLO LAS VERDADERAS PERSONAS QUEDAN... y es muy cierta esa frase...hay personas q pasan por tu vida q solo pueden estar 5 minutos horas 5 horas algunas 5 años o toda la vida.
Por eso les digo cuiden lo que tiene alado sea como sea luchen por eso q no tienen y una vez q lo tengan cuidenlon, cuidenlon mucho porque hoy puede ser todo color de rosas y al  otro dia una tormenta.

Ana Laura Pesca (yo)

miércoles, 6 de octubre de 2010

FALLA DE SEGURIDAD

Todos tenemos un monstruo o un fantasma adentro que no nos gusta, entonces creamos un sistema de seguridad para que no se note. Mantenemos el monstruo agarradito para que no salga ni se vea. Pero a veces el sistema de seguridad falla y el monstruo ingresa, y ahí quedamos expuestos. 
A veces eso que tanto queremos ocultar queda a la vista y nos avergüenza. Nos sentimos desnudos, sentimos que todos ven lo que en verdad somos, y somos algo que odiamos. 
Como si hubiera un Mr. Hyde en nosotros, como si el verdadero ‘yo’ fuera otro, y eso asusta. Nos asusta que falle el sistema de seguridad, que Mr. Hyde se desate y haga alguna locura. 
Vivimos alertas, atentos, vigilando el monstruo. Y así creamos mecanismos, defensas, nos aislamos, todo para que ese supuesto monstruo no salga a la luz. 
Cualquier cosa que nos saque del lugar seguro nos da miedo. Nos da miedo lo nuevo porque puede provocarnos cosas desconocidas. Odiamos a nuestro monstruo porque desea justamente las cosas que nos dan miedo. Queremos esconder a toda costa esa parte nuestra, esos deseos que nos inquietan. 
Son deseos que supuestamente no tendríamos que tener y nos esforzamos por reprimir. Son deseos que nos dan culpa, vergüenza. Deseos que van en contra de la moral, de lo que debe ser. 
Nos odiamos cuando nos dominan las pasiones. Nos odiamos cuando todos ven eso que queremos ocultar. Odiamos las fallas de seguridad, esos huecos que nos desnudan y muestran nuestras miserias. Pero la verdad es que a todos nos pasa lo mismo, todos tenemos un monstruito adentro ¿y sabés que hay que hacer con eso? Reírse de él. Ridiculizarlo, perderle el respeto y el miedo. Reírnos de nuestras cosas oscuras. 
Aceptar quienes somos, reírnos de nuestros miedos. Ridiculizar nuestros fantasmas. Reírnos a carcajadas de nuestras miserias. Permitirnos ser quienes somos y desear lo que deseamos. Bajar las defensas, aceptar las fallas de seguridad, y dejar que Mr. Hyde salga, porque en definitiva ese monstruo es también quien somos.

EL BUSCADOR

Esta es la historia de un hombre al que yo definiría como un buscador. 
Un buscador es alguien que busca, no necesariamente alguien que encuentra. 
Tampoco es alguien que, necesariamente, sabe q es lo q esta buscando, es simplemente alguien para quien su vida es una búsqueda. 
Un día, él buscador sintió que debía ir hacia la ciudad de Kammir. El había aprendido a hacer caso riguroso a estas sensaciones que venían de un lugar desconocido de si mismo, así que dejo todo y partió. 
Después de 2 días de marcha por los polvorientos caminos divisos, ha lo lejos, Kammir. Un poco antes de llegar al pueblo, una colina a la derecha del sendero le llamo mucho la atención. 
Estaba tapizada de un verde maravilloso y había un montón de árboles, pájaros y flores encantadoras: la rodeaba por completo una especie de valla pequeña de madera lustrada. 
...Una portezuela de bronce lo invitaba a entrar. 
De pronto, sintió que olvidaba el pueblo y sucumbió ente la tentación de descansar por un momento en ese lugar. 
El buscador traspaso el portal y empezó a caminar lentamente entre las piedras blancas q estaban distribuidas como al azar, entre los árboles. 
Dejo q sus ojos se posaran como mariposa en cada detalle de este paraíso multicolor 
Sus ojos eran lo de un buscador, y quizás por eso descubrió, sobre una de las piedras, aquella inscripción...: 

Abdul Tareg.vivo 8 años,6meses,2 semanas,3dias 

Se sobrecogió un poco al darse cuenta de q esa piedra no era simplemente una piedra no era simplemente una piedra, era una lapida. 
Sintió pena al pensar que un niño de tan corta edad estaba enterrado en ese lugar. 
Mirando a su alrededor el hombre se dio cuenta de que la piedra de al lado también tenia una inscripción. Se acerco a leerla, y decía: 

Yamir Kalib,vivio 5 años,8 meses y 3 semanas 

El buscador se sintió terriblemente conmocionado. 
Este hermoso lugar era un cementerio y cada piedra una tumba. 
Una por una ,empezó a leer las lapidas. 
Todas tenían inscripciones similares: un nombre y el tiempo de vida exacto del muerto. 
Pero lo que lo conecto con el espanto fue comprobar que el que mas tiempo había vivido sobrepasaba apenas los 11 años… 
Embargado por un dolor terrible se sentó y se puso a llorar. 
El cuidador del cementerio pasaba por ahí y se acerco. 
Lo miro llorar por un rato en silencio y luego le pregunto si lloraba por algún familiar. 
-No, ningún familiar-dijo el buscador-.¿Que pasa con este pueblo?,¿Qué cosa tan terrible hay en esta ciudad?,¿Por qué tantos niños muertos enterrados en este lugar?,¡¡¡¡¿Cuál es la horrible maldición que pesa sobre esta gente, que los ha obligado a construir un cementerio de chicos?!!!! 

El anciano se sonrió y dijo: 
-puede usted serenarse. No hay tal maldición. Lo que pasa es que aquí tenemos una vieja costumbre. Le contare… 
Cuando un joven cumple quince años sus padres le regalan una libreta, como esta que tengo aquí, colgando del cuello. 
Y es de tradición entre nosotros que a partir de allí, cada vez que uno disfruta intensamente algo, abre la libreta y anota en ella: 
A la izquierda ,que fue lo disfrutado… 
A la derecha, cuanto tiempo duro el gozo. 

conoció a su novia y se enamoro de ella.¿cuanto tiempo duro esa pasión enorme y el placer de conocerla?,¿una semana?,¿dos?,¿tres semanas y media?... 
y después la emoción del primer beso, el placer maravilloso del primer beso,¿Cuánto duro?,¿el minuto y medio del beso?,¿dos días?,¿una semana?... 
¿y el embarazo o el nacimiento del primer hijo…? 
¿y el casamiento de los amigos…? 
¿y el viaje mas deseado…? 
¿y el encuentro con el hermano que vuelve de un país lejano? 
¿Cuánto tiempo duro el disfrutar de estas situaciones? 
¿horas?.¿días? 

Así…vamos anotando en la libreta cada momento que disfrutamos…cada momento 

Cuando alguien se muere, 
Es nuestra costumbre, 
Abrir su libreta 
Y sumar el tiempo de lo disfrutado, 
Para escribirlo sobre su tumba, 
Porque Ese es, para nosotros, 
El único y verdadero tiempo VIVIDO 

SITUACION QUE ME PASO UN DIA..

estacione la moto..se me acerca un niño no mas de 7 años
-le cuido la moto
-no gracias
-y no tendras una moneda
-mmm...aveerrr dejame veeeer...no no tengo pero compro algo y te doy cuando vega ta?
-si gracias
compro...vuelvo a retirar la moto y le di una moneda de $10 lo quede mirando y el solo quedo mirando la moneda con una sonrisa enorme
me dice con la manito abierta y mirandome:
-wwoowww..y una moneda grande!!!!!
-nunca nadie me habia dado una moneda asi!
-gracias amiga..muchas gracias
yo solo lo miraba no sabia q contestarle en ese momento y se me pasaba por la cabeza..pucha y pensar q hay gente q dice no tengo ni un puto peso..estoy pelada como culo de mono...estoy pelada como huevo...paso escuchando todos los dias esas frases...pero no pensamos q hay realmente personas q no tiene ni un peso..q hay niños q tan solo con $10 son felices..q digo 10!..me juego q son felices con tan solo 5$.
enseguida salio corriendo a una panaderia q habia enfrente..y desde la vereda de enfrente me volvio a decir gracias, a lo q solo pude contestar no es nada.
despues de todo esto aclaro q no soy de dar plata a las personas q me piden..pero ese niño me pudo..a el le toco esa vida a mi o a vos q estas leyendo esto nos toco otra totalmente diferente..q quisas si no tenemos esa ropa de marca...ese "CHICHE" nuevo q vimos en la tele..el ultimo celular..chillamos...pesadiamos...atomisamos hasta q por cansancio..tan solo por cansancio conseguimos lo q queremos.
y les digo jamas se me va a olviadar la sonrisa y esos ojitos de ese niño q solo con $10 fue feliz

13/09/2010

Ana Laura Pesca(yo)

martes, 5 de octubre de 2010

LA VIDA ES...

La vida es una inmensa pista de atletismo donde se practica el salto con vallas, cada valla es un obstáculo, cada obstáculo un problema, cada problema un nuevo desafió.
dia a dia corremos por esa pista q su fin es solo y únicamente cuando no estamos en este mundo ya, si se presenta una "valla" hay q saltarla, y si nos caemos?? quedamos tirados en el piso mientras vemos pasar a nuestros "rivales"?.
si caemos nos tenemos que levantar como sea con fuerza y siempre mirando hacia adelante no deteniéndose mirando hacia atrás.
así es como se sigue en la vida...y así es la vida...si te caes levantate, si no podes busca ayuda q nunca en este mundo estas solo, pero jamas jamas jamas pienses en rendirte siempre lucha por llegar a tu meta, a tus sueños.


ESTA EN VOS SI TE QUEDAS TIRADO EN EL PISO O TE LEVANTAS Y LA LUCHAS


autora: Ana Laura Pesca (yo)

lunes, 4 de octubre de 2010

TODO A PULMON

Que difícil se me hace mantenerme en este viaje,sin saber a dónde voy en realidad,si es de ida o de vuelta,si el furgón es la primera,si volver es una forma de llegar.
Que difícil se me hace,cargar todo este equipaje,se hace dura la subida al caminar,esta realidad tirana,que se ríe a carcajadas,
porque espera que me canse de buscar.
Cada nota, cada idea,cada paso en mi carrera,y la estrofa de mi última canción,cada fecha postergada,la salida y la llegada,y el oxígeno de mi respiración,y todo a pulmón todo a pulmón.
Que difícil se me hace,mantenerme con coraje,lejos de la transa y la prostitución,defender mi ideología,buena o mala pero mía,tan humana como la contradicción.
Que difícil se me hace,seguir pagando el peaje,de esta ruta de locura y ambición,un amigo en la carrera,una luz y una escalera,
y la fuerza de hacer todo a pulmón.

ME LAMENTABA DE NO TENER ZAPATOS... HASTA Q VI UN HOMBRE SIN PIES

..siempre nos quejamos por pelotudeces de la vida..y lo primero q hacemos es caer..es pensar que el mundo termino..es creer q no hay otra salida...y no pensamos...q gente iguales que nosotros...estan peores..por causas que si son verdaderos problemas.
Cuando se nos corta la luz putiamos..hay gente que ni siquiera tiene luz.
Cuando nos quedamos sin agua putiamos...hay gente que tiene que caminar kilometros para traer agua
Cuando se nos corta el gas putiamos..hay gente que ni siquera tiene para comer directamente
Cuando se nos termina la tarjeta del cel y no podemos mandar un mensaje putiamos...hay gente que ni siquiera save escribir en un papel
Cuando se nos corta el cable...Cuando se nos corta el internet..etc etc etc.................etc
Nos quejamso por absolutamente todooo...y esas personas que realmente desde mi punto de vista si tienen q quejarse...se rompe el alma trabajando...pasan dias...noches..en la calle con tal de no se..por lo menos llevar un pedaso de pan para su familia.
y como dice el titulo ME LAMENTABA DE NO TENER ZAPATOS... HASTA Q VI UN HOMBRE SIN PIES


autora. ana laura pesca(yo)

ANIMARSE A VOLAR

Y cuando se hizo grande, su padre le dijo:

-Hijo mio, no todos nacen con alas. Y si bien es cierto q no tienes obligacion de volar, opino que sería penoso que te limitaras a caminar teniendo las alas que el buen dios te ha dado.

-Pero yo no se volar-contesto el hijo.
-Ven-dijo el padre.

lo tomo de la mano y caminando lo llevo al borde del abismo en la montaña.
-Ves hijo, este es el vacío. Cuando quieras podras volar. solo debes pararte aqui, respirar profundo, y saltar al abismo. Una ves en el aire extenderas las alas y volaras...

El hijo dudó:

-¿ Y si me caigo?

-Aunque te caigas no moriras, solo algunos machucones que te haran mas fuerte para el siguiente intento-contesto el padre.

El hijo volvio al pueblo, a sus amigos, a sus pares, a sus compañeron con los que habia caminado toda su vida.

Los mas pequeños de mente le dijieron:
-¿ Estas loco?
-¿ Para que?
- Tu padre esta delirando...
¿ Que vas a buscar volando?
-¿ Por que no te dejas de pavadas?
- Y ademas, ¿quien necesita volar?

Los mas lucidos tambien sentian miedo:
-¿ Sera cierto?
-¿ No sera peligroso?
- ¿ Por que no empiesas despacio?
- En todo caso prueba tirarte de una escalera.
-... O desde la copa de un arbol, pero... ¿desde la cima?

El joven escucho el consejo de quienes lo querian.
Subio a la copa de un arbol y con coraje salto...
Desplego las alas.
Las agitó en el aire con todas su fuerzas...
pero igual...se precipito a tierra...

Con gran chichon en la frente se cruzo con su padre:

-¡ Me mentistes! No puedo volar. Probe, y ¡mira el golpè que me di! No soy como tú. Mis alas son de adorno...

- HIjo mio- dijo el padre, para volar hay q crear el espacio de aire libre necesario para que las alas desplieguen.

Es como para tirarse en un paracaidas... necesitas sierta altura antes de saltar.

Para aprender a volar siempre hay que empezar corriendo un riesgo.
Si uno no quiere correr riesgos, lo mejor será resignarse y seguir caminando para siempre...



autor: Jorge Bucay